Superponer prendas, o layering, es una de las formas más simples y efectivas de transformar cualquier look. No se trata solo de abrigarse o sumar capas sin sentido: se trata de aprender a jugar con las proporciones, las texturas y los colores para lograr un estilo con más intención y personalidad.

En temporadas de Primavera/Verano, el secreto está en elegir materiales frescos como lino, poplín, gasa, algodón o viscosa, que permitan superponer sin sumar calor.

¿Cómo aplicarlo?

Comenzá por una prenda base, como un top, una musculosa o un body sin mangas. Sobre esas prendas podés sumar una camisa abierta, un chaleco de lino o cuerina. Para cerrar, una sobrecamisa o blazer funciona perfecto en espacios donde el aire acondicionado o las noches más frescas lo permiten.

Jugar con diferentes largos también genera un efecto interesante. Un vestido corto con una camisa abierta encima, o una pollera con un chaleco largo, crean dimensión sin necesidad de muchas capas. Podés aprovechar transparencias, tejidos o prendas que sumen textura sin peso visual. Este tipo de superposición da volumen, movimiento y mucho estilo.

Ejemplos según el estilo

Para un look casual, podés partir de una remera blanca de algodón como base, sumar una camisa abierta de lino natural y encima un chaleco negro que aporte contraste. Es un layering simple, fresco y con un toque visual que eleva lo cotidiano.

En un outfit clásico, el layering se construye con una remera lisa, un blazer de lino encima y denim o pantalón. Sumá un pañuelo atado a la cintura, marcando la silueta y aportando color sin recargar. El resultado es pulido, cómodo y elegante, ideal para la oficina o una salida.

En un look más canchero, jugá con el orden de las capas: usá una camisa blanca como primera capa o una remera liviana y sumá un corset encima. Sumá una falda o pantalón amplio, una cartera y listo!

Consejos para dominar el layering liviano

• Elegí materiales transpirables y colores claros para mantener la sensación de frescura.
• Evitá superponer prendas muy pesadas: el secreto está en combinar texturas y largos, no en sumar volumen.
• Usá accesorios como pañuelos finos, cinturones o collares largos para reforzar la idea de capas.
• Buscá equilibrio entre las proporciones: si la parte superior tiene varias capas, dejá la parte inferior más simple y limpia.

El layering en esta temporada se trata de jugar con la composición. Es una técnica que permite reversionar lo que ya tenés y adaptarlo a distintas ocasiones sin perder comodidad.

Superponer prendas es una forma de expresión. Una manera de construir estilo desde el detalle, con frescura y creatividad.

Te dejamos un tablero de pinterest con mucha inspiración para que te animes a esta tendencia! https://ar.pinterest.com/idilicafashionlab/layering/